El príncipe Guillermo ha estado dando lo mejor de sí en sus apariciones públicas desde que su esposa, la princesa Kate Middleton, anunció su diagnóstico de cáncer a mediados de marzo, y su visita al Hospital Comunitario de St. Mary el 10 de mayo no fue la excepción.
El futuro rey se reunió con el personal y posó para fotos en la instalación, ubicada en las Islas Scilly en el suroeste de Inglaterra, e incluso hizo una breve actualización sobre la salud de Kate, diciéndole a un administrador del hospital que Kate “estaba bien”, antes de agregar que sus tres hijos —el príncipe George, de 10 años, la princesa Charlotte, de 9, y el príncipe Louis, de 6— estaban celosos de que él viajara a uno de sus destinos familiares favoritos sin ellos.
Según todos los informes, Kate, de 42 años, parece estar en camino a la recuperación. En su emotivo anuncio de marzo, la princesa reveló que estaba en las “etapas iniciales” de tratamientos de quimioterapia preventiva.
En las últimas semanas, ha sido vista en esporádicas salidas con miembros de la familia y sola. “Kate se siente lo suficientemente fuerte como para estar muy involucrada con los niños”, comparte en exclusiva un informante en la última edición de Us Weekly. “Ha sido una madre activa”.
Y una segunda fuente agregó: “La recuperación de Kate va bien. No puede ver a muchas personas porque es susceptible de enfermarse y no quieren que se vea comprometida, pero está en pie”.
Sin embargo, las preguntas sobre su regreso al deber real siguen en el aire, y los últimos informes afirman que no se reincorporará el trabajo hasta otoño o incluso el año que viene.
Mientras que un ayudante real reveló a mediados de mayo que Kate había sido notificada sobre un nuevo informe publicado por su fundación, el Centro de la Fundación Real para la Primera Infancia, un portavoz del Palacio de Kensington fue rápido en aclarar que eso no significaba que volviera al trabajo. (También se ha confirmado que no asistirá a los ensayos para la ceremonia anual de Trooping the Colour, programada para el 15 de junio).
“Hemos sido muy claros en que [Kate] necesita espacio y privacidad para recuperarse en este momento”, dijo el Palacio, y agregó, “Ella volverá al trabajo cuando los médicos le den luz verde”.
Según la segunda fuente, el equipo de Kate está “reevaluando lo que podrá asumir cuando regrese”, al señalar, “Puede que nunca regrese al papel en el que la gente la vio antes”.
A finales de mayo, Kate y Guillermo, de 41 años, tuvieron un respiro cuando el rey Carlos III y su esposa la reina Camila anunciaron que la familia real pospondría ciertos compromisos después de que el Primer Ministro del Reino Unido, Rishi Sunak, convocara por sorpresa a elecciones generales para julio. (El Palacio de Buckingham dijo que la realeza cancelaría eventos que “pudieran parecer que desvían la atención o distraen de la campaña electoral”).
El respiro es bienvenido para la pareja. “El anuncio de que la realeza no podrá trabajar tanto ha sido inesperado, pero permitirá que Kate y Guillermo pasen más tiempo juntos”, dice la segunda fuente. “Han vuelto a conectar y están más unidos que nunca”.
La familia de cinco ha estado estacionada principalmente en su casa de verano en Norfolk, Anmer Hall. La casa de campo de 10 dormitorios —ubicada en la finca Sandringham—, cuenta con una piscina y cancha de tenis y toneladas de espacio para que los niños corran y jueguen.
“Están pasando mucho tiempo en familia allí”, dice la segunda fuente. En 2020, Kate reveló que sus momentos más felices son cuando está con Guillermo y los niños “afuera en el campo, y todos estamos sucios”.
George, Charlotte y Louis pronto saldrán de la escuela por las vacaciones para el medio trimestre, “y tienen muchas cosas divertidas” planeadas, dice la primera fuente.
Cuando no está en el deber de madre, Kate ha estado ocupada cocinando y horneando. Añade la segunda fuente: “Es una de sus actividades [favoritas]”.
Su círculo íntimo es pequeño y sólido. La madre de Kate, Carole Middleton, y su hermana, Pippa, “son una presencia constante”, dice la segunda fuente. (Kate fue vista conduciendo con su madre a principios de marzo).
“Los Middleton siempre han estado muy unidos”, agrega el experto real Richard Fitzwilliams. “La familia real tiene que ser terriblemente cuidadosa sobre [a quién dejan entrar], pero Kate sabe en quién confiar”.
Kate tiene tiempo para reflexionar sobre su papel real antes de que eventualmente vuelva al trabajo. Fitzwilliams cree que es probable que el público reciba información actualizada sobre la fecha de su regreso si permanece apartada hasta el otoño.
“Espero [para entonces] el palacio de Kensington nos haya informado cuando sea oportuno, porque se deberían haber aprendido lecciones de lo ocurrido”, explica sobre las teorías de conspiración que surgieron en la antesala del mensaje en video de Kate. “Si no te dicen nada, y pasan meses, claramente hay especulación, y eso podría volver a ocurrir. Así que estoy seguro de que se manejará de otra manera”.
Cuando Kate pueda volver, “será [basándose] en el consejo médico, y será muy cuidadosamente equilibrado”, dice Fitzwilliams, añadiendo que su batalla de salud es “obviamente tremendamente agotadora”.
No es ningún secreto que la vida como funcionaria pública puede pasar factura, y un factor que Kate debe tomar en cuenta es cuánto quiere asumir una vez que esté totalmente recuperada. “Su papel podría ser muy diferente”, dice la segunda fuente. “Está viendo en qué se convertirá”.
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Con información de Christina Garibaldi & Andrea Simpson
