Unos meses antes de que Wisin & Yandel finalizaran su gira de despedida como dueto de reggaetón, la pareja mandó a hacer una chaqueta. Era su regalo para los artistas que los acompañarían en su último concierto en el Coliseo José Miguel Agrelot en su natal Puerto Rico.
El detalle fue que, en la chaqueta, el emblemático dúo de música urbana fue retratado con sus rostros plateados, en una mezcla de alienígenas con “vaqueros futurísticos”, como los definió el diseñador mexicano Kiko Báez, de 24 años, quien se atrevió a presentarles su audaz propuesta en un boceto.
“¡Les encantó!”, contó en exclusiva a Us Weekly en Español y continuó: “Me dijeron, ‘No le muevas nada, así déjala, así la queremos’”.
Lo que Wisin & Yandel no sabían era que Kiko los conocía desde que tenía 5 años, cuando acompañaba a su papá a los swap meets (mercados de intercambio) que había en Mexicali, Tecate y lugares aledaños a la ciudad donde vivía en Tijuana.
“Desde chiquito yo acompañaba a mi papá a los swap meets a vender ropa y hacía mucho calor, pero me gustaba ir porque al lado se ponía una señora que vendía discos piratas y solo tocaba las canciones de Wisin & Yandel. A mí me gustaban mucho y era ahí el único lugar donde podía escucharlos, porque en mi casa no me dejaban”, cuenta con entusiasmo el diseñador mexicano.
De hecho, su primer disco fue el que le regaló su vecina del mercado: un disco pirata de los artistas urbanos y desde entonces se volvió fan.
El dúo de reggaetón conoció al diseñador apenas cuatro meses antes del cierre de su gira La última misión, cuando el muchachito se había aparecido en Chicago con regalos para los artistas participantes del concierto. Ahí los precursores del sonido urbano recibieron un duffle bag (una maleta de mano) como regalo de los organizadores, diseñada por el propio Báez, y hablando con Báez comenzaron a concretar algo más grande.
“El día que los conocí, estaba trabajando con un festival en Chicago”, cuenta el diseñador. “A mí me contrataron para hacer piezas (como regalo) para los headliners (artistas principales) y se me ocurrió hacer duffle bags, todas de arte en piel y se las dimos a J Balvin, Ozuna y a mis héroes Wisin & Yandel”, agrega.
Hacia el 31 de diciembre del 2022, Kiko Báez ya se encontraba en el coliseo con 20 chaquetas con el diseño alienígena que le inspiró Wisin & Yandel y esas chamarras terminaron en manos de Ozuna, Farruko, Jowell & Randy, Feid y Don Omar, todos gigantes del reggaetón.
“Ellos fueron como mis padrinos, porque literal, después de eso se abrieron mil puertas”, recuerda Kiko Báez.
Cuando hace memoria de qué lo inspiró, Kiko se remonta a su niñez y en esa época los veía como un concepto post-apocalíptico.
“Me acuerdo que salían todos vestidos de plateado, como si fueran vaqueros futurísticos. Quise basarme en eso, la chamarra fue toda en plata, pero difuminado con negro. Obviamente también me inspiré en su último Coliseo, entonces puse en la parte de abajo el coli, sus dos caras como sus siluetas saliendo de ahí, en medio el logo viejo que tenían. En la parte delantera, incluí su logo nuevo con el coli y ahí decía la fecha. En la manga decía: ‘la última misión’ y en la otra decía ‘el dúo de la historia’”, detalla Kiko.
Kiko, quien toda su vida profesional ha trabajado las prendas en piel, dice que hay chaquetas que pueden costar entre $200 (las más básicas) hasta los $5,000, dependiendo del nivel de detalle que requieran.
Recuerda que las chamarras para el concierto de despedida de Wisin & Yandel tuvieron un costo de unos $2,000. Un precio insignificante para las oportunidades que pudo capitalizar después con otras figuras como J Balvin, Maluma, Natanael Cano, Peso Pluma, Karol G, Offset, Saúl “El Canelo” Álvarez y hasta Vinicius Jr., la estrella del Real Madrid.
