Antes que June Diane Raphael tuviera su gran oportunidad como actriz, fue mesera en Nueva York y a menudo dependía de las propinas de los clientes.
“No recuerdo la propina más grande que recibí. Pero sí recuerdo la más pequeña y fue de alguien muy famoso, y su nombre era Sr. David Bowie” dijo Raphael, de 44 años, en exclusiva a Us Weekly en el evento One Fair Wage organizado por Chrissy Teigen el jueves, 6 de septiembre. “Es la verdad”.
Raphael solía trabajar en un restaurante en el barrio de SoHo en Nueva York, donde Bowie “solía venir a almorzar todos los días”.
Cabe recordar que Bowie falleció en 2016 a la edad de 69 años después de una batalla contra el cáncer de hígado.
“Yo solía atenderlo todo el tiempo y simplemente no dejaba propina”, recordó la exintegrante de ‘Grace and Frankie’ el jueves. “También es de Inglaterra. Hay un sistema aquí en los Estados Unidos que tampoco tiene sentido para otras personas porque piensan, ‘¿No te pagan?’ Y entonces tienes que explicar, ‘No, realmente no. Solo me pagan por propinas'”.
A pesar que Bowie dejaba propinas mínimas, Raphael afirmó que el ícono de la música era “una persona encantadora”.
“Solo un pésimo ‘propinero'”, bromeó Raphael. “Pero, él cantó ‘Happy Birthday’ para mí en mi cumpleaños. Eso no fue para nada un intercambio monetario, pero significó mucho”.
La experiencia de Raphael en la industria de servicios al cliente la inspiró a apoyar One Fair Wage.
“Bueno, como tantos otros actores y escritores y personas que han aparecido, comenzamos trabajando en restaurantes por propinas y por eso entendemos este problema”, dijo Raphael a ‘Us’. “Entendemos lo incierta que es la industria cuando trabajas por propinas… A menudo es un ambiente increíblemente sexualizado donde se te anima a coquetear con los clientes, estás coqueteando con el barman para llevar tus bebidas a los clientes y a menudo hay mucho acoso sexual. Entonces, si ese es el primer trabajo que tienen las mujeres, ¿cómo cambia eso lo que pensamos sobre el lugar de trabajo y lo que se permite en el lugar de trabajo?”
Agregó, “Luego, por supuesto, está el tema del dinero. Una vez que la gente realmente piensa en la idea de un salario mínimo subordinado, ¿cuál es, $2.13? Eso es completamente imposible. No puedes sobrevivir”.
Con reportajes de Carly Konsker
